Pantohematogen: cómo y por qué este producto está hecho de cuernos de ciervo
En el Altai se produce un producto sorprendente: el pantogematógeno. ¿Cómo se fabrica, por qué se toma y lo padecen los renos?
La cría de renos con cornamenta apareció en Altai hace más de cien años, a lo que contribuyeron las condiciones naturales y climáticas únicas de la región, que son las más favorables para la cría de renos con cornamenta. El ciervo rojo de Altái se considera una especie endémica, uno de los mejores representantes de este tipo de animales en el mundo. Esta especie de ciervo se encuentra en otras partes del mundo, pero es en los cuernos de Altai están cargados con el poder asombroso que da pantogematogen sus propiedades curativas – aquí en un metro cuadrado puede crecer hasta 50-60 especies de plantas y raíces, que alimentan a estos nobles animales.
El pantogematógeno es un potente adaptógeno natural, que se obtiene de los cuernos jóvenes (astas) del ciervo rojo de Altai. Más concretamente de la sangre que contienen, extraída de forma inocua para el animal durante el crecimiento activo de la cornamenta. Para obtener el pantagematógeno no se mata ni se tortura a los animales. A los ciervos jóvenes se les corta la cornamenta en el periodo de su crecimiento intensivo, aproximadamente de febrero a agosto. La cornamenta se diferencia de los cuernos osificados en que es blanda, esponjosa, hace circular la sangre con un alto contenido de sustancias biológicas activas. Las astas de maral contienen 20 aminoácidos vitales. También son ricos en macro y microelementos, contienen hierro, calcio, magnesio, fósforo, potasio, manganeso, selenio, cobalto, cobre, zinc, yodo. Por el número de sustancias útiles y la fuerza del efecto curativo en el cuerpo Altai pantogematogenu no tiene igual.
Sangre y astas de los ciervos rojos de Altai pertenecen a la categoría más alta de calidad, puede tener un impacto positivo significativo en el funcionamiento del cuerpo humano, debido a lo cual el costo de los productos de Altai de cría de renos astas es el más alto en el mercado internacional. El pantohematógeno fortalece el organismo hasta tal punto que él mismo hace frente a la enfermedad.
Se utiliza activamente en la práctica neurológica y gerontológica.
Posee propiedades tónicas.
Tiene un pronunciado efecto inmunoestimulante, aumenta las defensas del organismo y la resistencia a las enfermedades infecciosas mediante la estimulación de la inmunidad celular y humoral primaria Jg G.
Efecto positivo en neurosis, neurastenia, enfermedades del sistema cardiovascular relacionadas con el estrés, normaliza el sueño.
Aumenta el rendimiento mental y físico.
Acelera la recuperación y la cicatrización tras lesiones extensas, fracturas, intervenciones quirúrgicas, quemaduras, enfermedades graves y pérdidas de sangre.
Ralentiza el proceso de envejecimiento, activando los procesos energéticos y metabólicos en la vejez.
Estimula la función sexual.
Aumenta el rendimiento atlético, general y especial, acelera la rehabilitación tras lesiones deportivas.
Facilita y mejora las reacciones de adaptación del organismo cuando cambian las condiciones meteorológicas y climáticas.
Sobre la base del pantogematógeno se elaboran con frecuencia tinturas o cápsulas de alcohol, cómodas de ingerir. Otro producto de la cornamenta del maral son las rodajas de cornamenta, finas láminas cortadas de cuernos de ciervo rojo conservados y sin madurar. Las rodajas contienen muchos elementos minerales, aminoácidos (incluidos los esenciales), una serie de fosfolípidos y esteroides, que son 4-5 veces más en las astas que en los cuernos osificados.